Queque de Limón con Semillas de Chía

No, no he inventado la pólvora, la verdad es que he descubierto que podemos usar las semillas de chía en recetas que llevan semillas de amapola con resultados estupendos.

Así pues, tomé una de las recetas que tenía guardada desde hacía tiempo de un queque de limón con amapola y la transformé sin mucho esfuerzo en este delicioso Queque de Limón con Semillas de Chía.

Ya les había contado que en Perú no se puede comercializar las semillas de amapola, así que hay muchas recetas que no podemos hacer pues nos falta ese famoso ingrediente, aunque en verdad sí se pueden hacer, pero creo que le quitamos la gracia al resultado final por no tener esas pequeñas semillitas color negro en el interior.

Un día paseando por el Mercado Saludable de La Molina, llamaron mi atención unas semillitas negras que pude ver vendían unos metros más allá de donde yo estaba, inicialmente pensé, «no puede ser, semillas de amapola», corrí al puesto y entonces me detuve con una cara de interrogación frente al frasco pues lo que leía era «Semillas de Chía». Un producto totalmente nuevo para mí.

Después de ese día, comencé a ver algunas recetas con chía, algo que yo recién había escuchado que existía ya corría por los blogs en muchos lugares del mundo. Así que decidí que yo debería usarlo y qué mejor que en remplazo de las semillas de amapola pues el tamaño de las semillas es bastante parecido y por lo tanto no interferiría en las proporciones de los ingredientes…sólo quedaba el tema del sabor, pero no lo sabría si no lo probaba.

Investigué un poco por internet para explicarles de lo que se trata y para no saturarlos con nombres botánicos, les puedo decir que es una planta que se cultivaba hace muchos, muchos años en América Central y México y que tiene unas propiedades maravillosas pues contiene proteína, fibra y nada más y nada menos que omega 3.

La pueden consumir mezclada con jugos, ensaladas, lácteos, entre otros. Si se remojan en líquido llegan a soltar una sustancia medio gelatinosa, y tengo entendido que las semillas se pueden secar y a partir de eso hacerlas harina. Yo diría que es algo así como la linaza.

La receta de hoy la tomé de Joy of Baking, sí, el mismo lugar de donde tomé la receta del queque de chocolate con zucchini que tanto le gustó a mis hijos. Suele suceder que cuando uno hace una receta de una fuente y esta resulta muy buena, pues uno no duda de tomar otra receta del mismo lugar con la seguridad que el resultado será también bueno. Esta receta sin duda resultó muy buena.

En un tazón cernir la harina con el polvo de hornear, ralladura de limón y las semillas de chía. Como saben, en Perú usamos el limón verde, es decir el key lime pues no tenemos el limón amarillo.

En el tazón de la batidora colocar la mantequilla y batir por unos 2 minutos para que se haga como una crema, luego agregar el azúcar y seguir batiendo por unos 2 minutos más. La idea es que ambos ingredientes queden bien integrados. Para esta receta usé una mantequilla light completamente nueva que encontré en el supermercado, es baja en sal y baja en grasas.

Agregar los huevos uno por uno, mezclando bien después de cada adición. Los huevos los pongo en la masa después de mezclarlos un poco cada uno. Hay que ir raspando los bordes y el fondo del tazón para lograr una masa uniforme.

Agregar la vainilla y seguir batiendo, hasta lograr una masa bien cremosa. Este batido hará que entre aire a la masa y con eso conseguiremos un queque ligero y esponjoso.

Bajar la velocidad a mínimo y agregar los ingredientes secos en tres tandas.

Alternar los ingredientes secos con dos tandas de la leche. Mezclar sólo hasta que los ingredientes se integren.

Vaciar la masa en un molde rectangular engrasado y con el fondo forrado con papel manteca, también engrasado y hornear en horno precalentado en 350°F/180°C por 55 minutos, hasta que al introducir un probador, este salga limpio.

Mientras se hornea el queque, hay que prepara el almíbar de limón. Colocar en un recipiente apto para microondas el jugo de limón y azúcar, Mezclar bien.

Llevar al horno microondas por 1 minuto, hasta que el azúcar se haya disuelto. La receta dice que de 20 a 30 segundos, pero mi horno no tiene mucha potencia y por eso necesitó más tiempo. Les sugiero que lo pongan primero 20 segundos, verifican el estado del almíbar y lo van poniendo de 20 en 20 hasta que consigan que el azúcar ya no esté. Esto lo pueden hacer también en una olla, pero demora un poco más.

Cuando que queque esté listo, retirar del horno e inmediatamente untarlo con el almíbar de limón. Pueden pincharlo con un palito para brocheta y luego pasarle el almíbar, de ese modo penetrará bien por todo el queque.

Dejar que enfríe unos 30 minutos dentro del molde y luego con cuidado desmoldarlo y colocarlo sobre una rejilla hasta que enfríe totalmente. Queda delicioso al día siguiente, ya que el almíbar habrá humedecido bien todo el queque.

Hacer click aquí para obtener la receta del Queque de Limón con Semillas de Chía.